Tal vez ningún invento afectó la vida cotidiana estadounidense en el siglo XX más que el automóvil. La tecnología para su fabricación existía en el siglo XIX, pero Henry Ford tardó hasta el siglo XX en hacer accesibles los vehículos al público estadounidense.
El coche cambió drásticamente para mejor las vidas de los americanos, no solo mejoró el transporte, sino que también creó un impulso económico para la sociedad. La demanda de caucho se disparó y la construcción de carreteras creó miles de puestos de trabajo.
Al principio, los automóviles mejoraban la vida de los seres humanos, pero posteriormente empezaron a aparecer problemas ambientales. En este mundo imperfecto, el proceso de combustión causado por los motores de los automóviles emite varios tipos de contaminantes.
La quema de gasolina en los automóviles libera dióxido de carbono, que es la mayor fuente de emisiones de gases de efecto invernadero en Estados Unidos. El aumento del calor en la atmósfera provoca cambios en los ecosistemas y en los patrones meteorológicos, como el aumento del nivel del mar, y afecta a los patrones de precipitaciones.
Los seres humanos pueden experimentar efectos a corto y largo plazo debido a la exposición a la contaminación del aire. Los efectos a corto plazo, por lo general temporales, pueden variar desde náuseas hasta bronquitis. Mientras que los efectos a largo plazo pueden incluir enfermedades cardíacas y cáncer de pulmón que llevan a la muerte. En 1952, más de 3.000 personas murieron en lo que se conoció como la "niebla asesina" de Londres. El smog era tan denso que los autobuses no podían circular sin guías que caminaran delante de ellos llevando linternas.
Entonces se alertó a la humanidad las amenazas que la contaminación atmosférica representa para la salud. En 1963 se aprobaron varias leyes federales y estatales, incluyendo la Ley de Aire Limpio, que dio fondos para estudiar los efectos y ayudar a limpiar la contaminación del aire. En 1970 el Congreso aprobó una Ley de Aire Limpio más fuerte y creó la Agencia de Protección Ambiental, conocida como la EPA. De nuevo en 1990 el Congreso amplió la Ley de Aire Limpio, otorgándole a la EPA más autoridad para implementar regulaciones que reduzcan las emisiones contaminantes.
En todo el mundo, muchos países han tomado medidas para reducir o limitar las emisiones de gases de efecto invernadero a fin de combatir el calentamiento global. El Protocolo de Kioto, adoptado por primera vez en la ciudad del mismo nombre en Japón (1997), es un acuerdo entre 183 países de que trabajarán para reducir sus emisiones de dióxido de carbono. Los Estados Unidos no han firmado ese tratado.
Junto con la actividad humana, los automóviles representan una amenaza para el medio ambiente por el calentamiento global, la contaminación del agua y la lluvia.
El combustible fósil; con el tiempo se agotará. El calentamiento global va a ocurrir tarde o temprano, y la liberación de dióxido de carbono en el aire, a través de la quema de gasolina, solo va a hacer que suceda más rápido. Los problemas de salud humana relacionados con una contaminación van a seguir empeorando, muerte causada por este problema ya está ocurriendo y las cifras van a seguir aumentando. Los seres humanos dependen de los automóviles como su principal medio de transporte, pero compartir el coche o el transporte público reduciría su huella de carbono. Si todos hiciéramos una sola cosa al día para ayudar al medio ambiente, tal vez podríamos ayudar a la sostenibilidad de la Tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario